En los últimos años, el doypack se ha convertido en el envase sostenible de referencia entre el packaging de productos alimentarios y cosméticos. Sus múltiples ventajas frente a otros envases rígidos y tradicionales – como los tarros de vidrio o las latas – le han convertido en la mejor opción de embalaje ecológico para el recién estrenado 2021. A continuación, os explicamos el por qué de su gran éxito.
Le evolución del Doypack: paso a paso
El Doypack tiene su origen en el año 1963. Cuando el presidente de la sociedad Thimonier, Louis Doyen, inventó este formato marcando el inicio de un cambio radical en el concepto de “Envase Flexible”. Su nombre viene de la asociación de DOYen PACKagin, aunque también es conocido como bolsa stand-up.
Ya en aquel entonces, el doypack tuvo una gran aceptación en el sector de la alimentación. Ofrecía muchas ventajas frente a otros envases rígidos como podían ser latas, botellas, etc. Esta transgresión provocó que, muy pronto, la industria cosmética se fijara en las posibilidades de este formato. Y lo adoptó para algunos de sus productos como geles, colutorios o champús.
Así fue como el anhelo por buscar formatos diferentes y adaptarlos a la monodosis, ha llevado a la industria de cosméticos a dirigir su mirada al doypack.
Envase sostenible comprometido con el medio ambiente
La bolsa stand up es un envase sostenible, cuya capacidad de compromiso con el medio ambiente, avala su proceso de fabricación, almacenado y transporte.
Fácil almacenaje y transporte económico
Las nuevas y reducidas dimensiones del Doypack permiten una mayor capacidad de almacenaje. Y a su vez, reduce considerablemente el coste de transporte.
Debido a la reducción del peso y volumen, también se reduce su huella de carbono con el transporte por lo que podríamos decir, que es un envase flexible comprometido con el medio ambiente.
Materiales 100% reciclables
En la actualidad, los fabricantes de bolsas flexibles como el Doypack, ofrecen a sus clientes la posibilidad de envasar el producto en un packaging elaborado con materiales 100% reciclables. E incluso, biodegradables y compostables.
Reducción de la huella de carbono
La huella de carbono es un indicador ambiental que pretende reflejar «la totalidad de gases de efecto invernadero (GEI) emitidos por efecto directo o indirecto de un individuo, organización, evento o producto. Tal impacto ambiental es medido llevando a cabo un inventario de emisiones de GEI o un análisis de ciclo de vida. Según la tipología de huella, siguiendo normativas internacionales reconocidas, tales como ISO 14064, ISO 14069, ISO 14067, PAS 2050 o GHG Protocol entre otras.
En Envasados a Terceros – tras más de 30 años de experiencia en el sector del packaging – nos adaptamos a la innovación, proactividad y servicio personalizado que demanda este tipo de envase sostenible.
Además, trabajamos con una múltiple gama de envases flexibles a medida. Los principales formatos de envase que utilizamos son el doypack (normal, eurohole, zip, pouch). El sachet o sobre monodosis (simple, duplex y con forma de botella). Las muestras de perfumes (viales), tubos, tarros y bolsas tipo flowpack.
Servicios de envasado y atención personalizada
En Envasados a Terceros te asesoramos y aconsejamos sobre la solución de embalaje más adecuada para tu producto. Si deseas ampliar información sobre este u otro de nuestros servicios de envasado sostenible que ofrecemos, no dudes en contactarnos. Puedes llamarnos al 93 7 48 47 74 o escribirnos a través de nuestro formulario de contacto.
¡Gracias por leernos! Hasta el próximo post.
Deja un comentario